domingo, 13 de enero de 2013

La ceguera de la Justicia. Tesis sobre un homicidio, Diego Paszkowski


Sudamericana, 1999

             Antes que nada, deseo aclarar que este libro fue leído el pasado mes de octubre de 2012, sin tener noticia alguna de que se estaba filmando la correspondiente película, cuyo estreno es anunciado para el próximo jueves 17 del corriente según la cartelera local. De esta manera, pretendo salvaguardar las sensaciones transmitidas por el texto en su momento, antes de verme influido por las imágenes de la adaptación cinematográfica. Mis líneas son las que siguen.

            Este libro aparecía recomendado en un artículo sobre novela policial local, hace ya unos años, en una columna periodística inserta en una revista que acompaña la edición dominical de un importante matutino de Buenos Aires. Al buscarlo en las librerías, ya no se encontraba disponible. Merced a mi férrea constancia de visitar las ferias de libros usados, lo hallé y llevé. El hecho de haber recibido el Premio Novela 1998 -auspiciado por el propio periódico- acicateó más mi curiosidad.
            La novela narra la historia de dos protagonistas. Paul Besançon, de veintitrés años, abogado de brillante promedio e hijo único de un agregado cultural de Francia en la embajada de Buenos Aires, regresa a ésta a realizar una especialización en Derecho Penal, impartida por el doctor Roberto F. Bermúdez, ex - catedrático de la Facultad de Derecho de la Universidad local, retirado, con cincuenta y cinco años y un relativo buen pasar.
            Paszkowski compone dos personajes totalmente opuestos. Al joven obsesivo, metódico, frío y oscuro, sin vida social y con un amor enfermo por la actriz Juliette Lewis –de quien posee toda su filmografía-, opone un célebre abogado –conductor de un programa televisivo sobre leyes- descreído de la Justicia y sumido en un cuadro maníaco – depresivo debido al abandono de su esposa después de muchísimos años de matrimonio. En el transcurso de las ocho semanas que dura el curso, Paul intentará llevar a cabo su cometido: demostrar que la Justicia es tan ciega, que es incapaz de atrapar a quien comete un homicidio al azar, sin motivo alguno. Para ello, desarrollará un minucioso plan y le dará pistas del mismo a su maestro –a quien desprecia-. Éste, consciente de la imposibilidad de atraparlo por falta de pruebas, intentará hacer justicia por mano propia, infringiendo algunas de las leyes que él mismo tanto ha contribuido a respetar.
            Ambientada en el Buenos Aires de 1997, con profuso detalle del barrio de Recoleta y haciendo continua alusión a lugares referenciales como plazas, iglesias, museos y restaurantes -muchos de los cuales ya no existen-, el autor construye un relato de dieciséis capítulos en estilo coloquial y fluido. Escrito mediante la técnica de ‘monólogo interior’, no existen saltos ni separaciones, salvo un par de excepciones; así, cada uno de ellos alberga un único párrafo.
            La trama está bien llevada, con acertadas descripciones de los personajes y sus psicologías, aunque parecen algo estereotipados. Lamentablemente, la historia se desbarranca hacia el final, perdiendo gran parte de credibilidad. No obstante, resulta entretenido; una atinada distracción para llevar de viaje.
            Marcelo Zuccotti

8 comentarios:

  1. No me convence mucho, más que nada por el descarrilamiento del final. Otra vez será,
    Besos

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  2. El final del libro -no del guión, seguramente- es poco creíble. Quizás ésa sea su debilidad. Todo el resto, vale la pena, Norah. Gracias por pasar.

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  3. Esta vez supongo que sería yo el que tendría problemas para hacerme con el libro. es cierto que lo que dices de que al final se hace poco creíble deja al lector en potencia algo en frío ¿para qué embarcarse en un libro del que no nos va a gustar el final? Y eso que la reseña engancha. un abrazo Marcelo.

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    1. Cuando vea el film, Yossi, creo que podré completar estas impresiones. Lo cierto es que no solo a mi me ha pasado con el final; un amigo librero -que casualmente estaba leyendo el mismo libro en el mismo momento- hizo un comentario idéntico. No obstante, hasta el último capítulo, la trama resulta cien por ciento creíble.
      Quizá no te resulte tan difícil: con motivo del lanzamiento del film, Sudamericana reeditó el libro.
      Un abrazo para ti.

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  4. El argumento me parece bueno a pesar de tu observación del final, sin embargo lo que no me convence es ese formato de monólogo interior al que aludes, sin interrupción alguna. Me ha pasado que con redacciones similares de estilo se me ha hecho un poco densa la lectura. Supongo que son vicios literarios personales, ja. Besos!

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    1. El relato, Andy, está bien construido, salvo la pavada del final. Reconozco que la técnica del monólogo interior puede resultar densa, pero la extensión del texto lo permite. Me animaría a proponerle a quien lo lea, que se anime a escribir un final más creíble.
      No esperes demasiado del guión adaptado a la pantalla. Por lo que he visto en el trailer, hay serias diferencias. Besos para vos.

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  5. Me parece una lectura interesante, Marcelo. Me gusta la técnica del monólogo, la reflexión y la diferencia entre ambos personajes. Veremos si lo encuentro, me gustaría
    Besos

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    1. En este mismo día, se está estrenando aquí, en Buenos Aires, la película basada en este libro. Es probable que lo puedas encontrar, con motivo de esto, cuando llegue a tu ciudad, Silvia -creo que así te han escrito, ¿verdad?-. Gracias por pasar. Aprovecho para declararte mi admiración y sana envidia por lo mucho que lees. Besos para ti.

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