miércoles, 27 de mayo de 2020

Trilogía Hermanos. e-book 60. 2. Los hermanos Ashkenazi, Israel Y. Singer


Ediciones B, 2003

I.

            Quería leer una obra con trasfondo histórico y decidí empaparme en la realidad social de Europa Central, desde fines del siglo XIX hasta poco después del fin de la Primera Guerra Mundial. El autor comenzó a escribir esta obra estando aún en Varsovia en 1933 –con el ascenso del nazismo al poder- y la concluyó ya en Nueva York, dos años más tarde.

II.

            Es la historia de dos hermanos mellizos, Simja (Max) y Jacob (Yakub), hijos de un importante hombre de negocios y observador de la Ley judía. Ambientada en la ciudad de Lódz, bajo dominio ruso, Singer exhibe los detalles de la vida de estos hermanos quienes al poco ya atisban sus personalidades e inclinaciones. Max, inteligente y manipulador, será expulsado de la familia por abandonar sus estudios de la Ley, aunque forjará un futuro más que promisorio como director de una empresa líder en tejidos industriales. Yakub, afable y divertido pero sin gran disposición al trabajo, obtendrá iguales beneficios a través de un conveniente matrimonio y su herencia paterna, por más que luego haga opción por los placeres mundanos.

III.

             Estructurada en tres partes bien definidas, la novela comienza con la descripción minuciosa del acontecer de la colectividad judía, sus características y rituales. También expone el esfuerzo de sus miembros por hacerse de un lugar en la comunidad en que habitan -aún frente a un rudo antisemitismo-, el machismo paternalista de la sociedad judía –en el que las mujeres no cuentan más que para la descendencia- y los costos de la asimilación social en detrimento del acervo cultural judaico.
La versión digital, gentileza de  Epublibre

IV.

             Respecto de la trama, Max encarna al judío envidioso y mezquino, más pendiente de los réditos que otorgan el trabajo y las inversiones que de las necesidades de afecto de su familia. No es tanto la codicia lo que alimenta su afán sino la necesidad imperiosa de alcanzar renombre y poder. Yakub, en cambio, encarna al pródigo hedonista de amplia vida social, sin mayores compromisos.

V.

            La novela, además, retrata las luchas sociales contra el hambre y la marginación, la llegada del marxismo, el impacto de la guerra y la caída de los Imperios Centrales, las pujas entre el socialismo y el sindicalismo y los cambios suscitados por el arribo del capitalismo y la tecnología. De estilo coloquial, ameno y fluido, el libro es un bello resumen de la vida en esos años. Agradezco a Utopía su sugerencia; sus líneas se pueden leer aquí. Un libro más que interesante.

viernes, 22 de mayo de 2020

Pervivir en el arte. Charlotte, David Foenkinos


Alfaguara, 2015

I.

             Venía precedido de buenos comentarios de amigos lectores, por lo que me hice de un ejemplar. Parecía un libro destinado a almas sensibles y, además, se hacía promoción del estilo literario escogido por el autor para darnos a conocer a una figura desconocida para muchos –me incluyo- cuya trágica vida, tronchada antes de la treintena, conjugaba un drama familiar con el suyo propio. Pero otras miradas -más críticas acerca del texto- hicieron que esperara hasta hoy.

II.

            Foenkinos descubre la pintura de la artista Charlotte Salomon -una joven alemana judía muerta en una cámara de gas en Auschwitz en 1943- en un museo, y se obsesiona con su arte. A partir de allí, indaga todo lo que puede acerca de su vida y obra, busca testimonios, persigue sus posibles pasos, y construye algo así como una novela sin serlo. Como un poemario de frases cortas, que no son poemas; como una historia personal que pervive en su arte.

III.

            Toda la atmósfera que rodea al personaje está signada por la tragedia. La protagonista aprende su nombre a partir de la tumba de su tía. Su madre muere algún tiempo después, cuando aún era niña. Mientras los nazis ascienden, queda a cargo de su padre, que vuelve a casarse con una cantante lírica. Charlotte descubre su amor por el dibujo y la pintura. Al crecer, conoce el amor por un hombre. El recuerdo de ese amor la acompañará en el exilio en Francia, junto a sus abuelos, durante mucho tiempo. Luego, sin apoyo y sin mecenas, conocerá las peripecias de los judíos en una Francia ocupada por los nazis. Hasta que, al final, terminará siendo trasladada, con veintiséis años y encinta.

IV.

            Abundan datos familiares y posibles anécdotas de la biografía en este trabajo de Foenkinos, que hacen hincapié en la secuencia de suicidios que han tenido lugar en los miembros cercanos de la familia de Charlotte, como presagio de lo que le acontecería. Pero también hay momentos de luz, más allá de las restricciones que el nazismo impone a los judíos alemanes. El candor de la esperanza en que todo se aclarará –cuando todo se habrá de oscurecer aún más- es un acierto del narrador.

V.

            Critico, en cambio, el estilo narrativo elegido para allegarlo al lector. A fuer de intentar, con frases cortas y sentidas, conmoverlo, no sólo no alcanza su objetivo sino que termina banalizando la figura de quien ha sido su numen inspirador, a la vez que convierte en algo naif una historia que bien podría haber cobrado ribetes más que interesantes, en otra estructura. Algo para tener en cuenta a la hora de encararlo.

domingo, 17 de mayo de 2020

e-book 59. Denuncia literaria. "Operación Masacre", Rodolfo Walsh


Ediciones de la Flor, 2001

I.

            La elección de este título recayó a consecuencia de la lectura de Soldados de Salamina, una ficción de Javier Cercas basada en una anécdota de la Guerra Civil española. Al líder del taller de lectura en el que participo le pareció oportuno oponer al anterior un relato de no-ficción, una investigación periodística destinada a esclarecer un hecho turbio de nuestra historia reciente.

II.

            La noche del 9 de junio de 1956, la denominada Revolución Libertadora –que en setiembre de 1955 puso fin mediante un golpe militar al gobierno de Juan D. Perón- sufre un conato cívico-militar peronista. Éste es rápidamente sofocado y sus responsables son fusilados por ley marcial. Pero un puñado de hombres reunidos en los suburbios de la ciudad de Buenos Aires con el fin de escuchar por radio el relato de una reunión de boxeo son detenidos y trasladados a una comisaría de la zona, primero, y luego, fusilados por orden del Jefe de Policía, por estar supuestamente vinculados en aquél, esperando para actuar la resolución victoriosa de la contienda armada.

III.

            Este trabajo, que fue viendo la luz por entregas en publicaciones de escasa tirada a partir de comienzos de 1957, es el primero de una serie que catapultaría a la fama a su autor y que recién muchos años después volvería célebre Truman Capote con A sangre fría. En ese sentido, si bien Walsh no puede considerarse el pionero de este estilo literario –ya Tom Wolfe lo venía realizando en E.E.U.U.-, al menos fue el primero en efectuarlo en el ámbito local.
La versión digital, gentileza de Epublibre

IV.

             Estructurado en tres partes, en los capítulos de inicio realiza una semblanza de cada uno de los implicados en el fusilamiento a través de testimonios de supervivientes y familiares de las víctimas –la negligencia policial permitió la fuga de siete de ellos, dejando en el campo a los cinco restantes-. Luego, narra los hechos, desde la reunión inicial hasta el fin del operativo. Más tarde, alude a los pormenores de la investigación penal llevada a cabo por la Justicia a partir de la denuncia de un sobreviviente.

V.

            Además, la obra presenta un prólogo de Osvaldo Bayer y se acompaña de la Carta Abierta a la Junta Militar, texto escrito por Walsh que fuera hecho circular al cumplirse el primer aniversario de la misma en el gobierno, en el que denuncia la acción de grupos paramilitares que secuestran posibles opositores, los someten a torturas varias para finalmente desaparecerlos. Tampoco elude la renuncia de la soberanía al capitalismo internacional y el aumento de presupuesto en el ministerio de Defensa. La Carta tuvo efecto inmediato: Walsh desapareció la noche siguiente. Una denuncia literaria, fiel retrato de una época.

martes, 12 de mayo de 2020

Muñeca rota. Nada se opone a la noche, Delphine de Vigan


Anagrama, 2013

I.

            Así como hace un tiempo apareció lo que hoy llamamos novela histórica -narración elaborada a partir de un hecho cierto, abundosa en conjeturas y suposiciones pero sin documentación que las avale-, podríamos expedir un acta fundacional de la novela familiar testimonial, en la cual los autores intentan, bien exorcizar un pasado de violencia física y/o psicológica –ejercida por adultos de la familia, como es el caso de James Rhodes en Instrumental-; o realizar un buceo sobre la propia historia personal para intentar explicarse a sí mismo (Knausgård es buen ejemplo), o reconstruir el pasado de un progenitor a modo de interpretación, sin eludir las experiencias traumáticas que se hayan padecido, como es el caso presente.

II.

            La historia de Lucile Poirier, madre de la autora, es el eje central de la narración. Dividida en tres partes, de Vigan rescata la vida de su madre, miembro de una familia numerosa de hermanos, a partir de sus padres, Georges y Liane. El trágico final que acaba con su vida no es único; ya antes ha habido otros casos que la familia ha debido asimilar –a su manera-. Valiéndose de recuerdos propios y ajenos –una cinta grabada de su abuelo, los testimonios de sus tías y abuela, y cierta investigación periodística de los tiempos en que Lucile era una figura de la publicidad-, realiza una reconstrucción cercana y emotiva que la tiene como protagonista.

III.

            El carácter apocado y silente de Lucile, comienza a dar paso a una inestabilidad psicológica que la obliga a estar internada durante algunos períodos de su vida. Lo más cruel es el momento en que estos brotes psicóticos le acontecen cuando sus hijas aún están bajo su responsabilidad. Delphine –no sin dolor de hija- narra descarnadamente cómo su madre se ha convertido en una muñeca rota. Por lo demás, el texto rezuma cierta melancolía, sin escatimar escenas fuertes.

IV.

            Escrito en estilo coloquial, cercano al lector, de Vigan desnuda los detalles de la vida de Lucile. En la primera parte, aborda la infancia y sus secuelas. En la segunda, toma la voz el testimonio de su hija. Finalmente, vuelve a los momentos más equilibrados –si no más felices- y sus últimos tiempos. El gran acierto de este libro es que la voz conductora se reparte en tres: la de la escritora en primera persona, intentando explicar sus problemas para enfrentar la muerte de su madre; la de la hija, testigo de su historia con Lucile, y la de la historiadora en tercera persona, narrando a partir de documentos o testimonios familiares.

V.

            En suma, un buen libro; sin golpes bajos, directo y bien estructurado. Debo esta lectura a Saramaga, quien me lo acercó. Luego descubrí a Ana B., María, RosaLorena y Rocío que lo han abordado en sus espacios. Un click en sus nombres los conduce a sendas opiniones. Para lectores sensibles.

jueves, 7 de mayo de 2020

Pelibro 19. El fin de la aventura

         Una relectura que es acompañada de una re-visión. Había visto el film al poco del estreno. Pasaron varios años hasta que un amigo me convenció de leer el libro. Al recordar las escenas de aquél, intenté hacerme de un ejemplar aunque ya habían desaparecido de las librerías. Sin embargo, en una recóndita esquina, una librera amiga pudo acercarme este volumen de origen chileno. Existe una nueva edición bajo el sello de Libros del Asteroide –que también poseo en versión digital-. Si bien parece más íntegra, preferí la más antigua; su traducción se apega mejor al English sense del original.

Libro
EL FIN DE LA AVENTURA

Graham Greene (Andrés Bello, 1992)

            Estamos en Londres, en febrero de 1946. El novelista Maurice Bendrix se cruza una noche por azar, bajo lluvia copiosa, con Henry Miles, funcionario del Gobierno, esposo de Sarah, con quien aquél mantuvo un amorío durante cuatro años, hasta que un hecho puramente fortuito hizo que concluyera abruptamente. Es entonces que Bendrix se retrotrae a fines de 1939 y comienza a narrar en primera persona toda la historia con Sarah. No oculta que ésta es una historia sobre un amor sublime que devino en odio. Odio a que Sarah lo dejara; odio a que Henry estuviera aún con ella. Tras año y medio de ausencia, Henry le confiesa sus celos sobre Sarah, por un posible nuevo amor. Bendrix, picado en sus propios celos de amante despechado, decide contratar a un detective privado que le informe semanalmente, de manera de desenmascarar a ese rival y, si pudiera, volver a conquistar el amor de Sarah.

            Esta breve novela de Greene -estructurada en cinco libros-, que amanece como un clásico triángulo amoroso, no relata sólo una historia de amor. Es, en el fondo, una puja entre la pasión y la fe. Ninguno de los personajes centrales cree en Dios pero, al parecer, Él obra un pequeño milagro que desencadena la ruptura del idilio sostenido por la pareja de amantes.

            ¿Se puede formular una promesa a quien consideramos que no existe?, ¿qué validez tiene sostenerla en el tiempo, si se supone que nadie vendrá a recriminar su incumplimiento?, ¿por qué ser fiel a ella, cuando se ha sido infiel a todo lo demás; máxime, cuando el dolor que acarrea su cumplimiento nos ha de desgarrar el alma?, ¿es necesaria la experiencia del dolor para alcanzar la verdadera fe? Estas son algunas cuestiones con que el autor nos interpela acerca de cuál es la esencia de la fe de aquellos que creen religiosamente en algo.

            Así, el pasado se reconstruye a través de la narración de Bendrix, a medida que la pericia del investigador privado va allegando datos de aquél mezclándolos con los del presente, de manera que Greene efectúa un contrapunto entre ambas historias. Además, tampoco elude las dudas de Sarah sobre su fe incipiente y la rotunda negación de Bendrix sobre la existencia de Dios, dejando un final abierto que supone un atisbo de redención.

            Con una prosa fluida, coloquial, escenas de alto contenido erótico, singular dominio de la característica flema inglesa y una memorable composición psicológica de los personajes protagónicos como de los secundarios, Greene elabora una gran novela, digna de estar entre las mejores obras literarias del siglo XX. Para no perderse.


Film
EL OCASO DE UN AMOR


Neil Jordan (Columbia Pictures, 1999)

            Esta versión de Neil Jordan sobre el libro de Greene se apega bastante bien en su primera mitad, aunque sin los matices y la riqueza de las reflexiones que el propio narrador va desgranando en el texto original. Eso hace que el film se condense demasiado –supera escasamente la hora y media de duración- y brinde más bien un resumen de aquél. La segunda mitad del guión –también escrito por Jordan- es una resolución bastante inteligente pero que poco tiene que ver con la novela. El director ha encontrado una salida galante para no tener que entrar en las disquisiciones religiosas que sí figuran en la obra de Greene. Mantiene en gran medida el espíritu de la misma, aunque se inclina por un drama romántico algo meloso hacia el final.

            Julianne Moore, a cargo del rol de Sarah Miles, brilla con luz propia. Tanto en el tono de voz como en el despliegue de movimientos en cada escena se corresponden con el personaje de Greene. Destaco también el excelente trabajo de Stephen Rea en el rol del marido; compone a la perfección al funcionario flemático inglés, incapaz de preocuparse por otra cosa que no sea su trabajo en el Ministerio. Más flojo es el desempeño de Ralph Fiennes en el rol de Maurice Bendrix; no termina de encarnar con convicción al sujeto posesivo y celoso. La ambientación, tanto como el vestuario de época logran una gran performance y la música confiada a un maestro como Michael Nyman está a la altura del elemento narrativo. El resto del elenco, acompaña adecuadamente.

            Mucho se ha comentado sobre las escenas de alto contenido erótico presentes en la cinta. Si bien sospecho que no debe haber sido fácil filmar los cuadros donde ambos actores están casi desnudos, lo cierto es que el cuidado que ha tenido la cámara de no exponerlos inútilmente resulta destacable. En suma, una buena película, relativamente breve pero muy interesante.
Testimonio del decimonoveno Pelibro

sábado, 2 de mayo de 2020

e-book 58. Facturas impagas. Cinco horas con Mario, Miguel Delibes


Booket, 2009

I.

            Quería amortizar algo de la deuda que mantengo con el autor y me pareció oportuno visitar este título, enmarcado dentro de lo que suele llamarse el realismo social español. Una obra aparecida hacia mediados de los años ’60 del siglo pasado, en pleno boom económico y el desarrollo de una incipiente clase media, favorecida por una Ley de Prensa que, al menos, permitía publicaciones como la presente, con el franquismo aún al frente del gobierno.

II.

            A Carmen Sotillo se le ha muerto inesperadamente Mario, su marido durante veintitrés años y padre de sus cinco hijos. Tras el golpe inicial, comienzan a visitar a la flamante viuda todos sus vecinos y amigos con motivo de allegarle el consabido pésame. Cuando el desfile decae hacia el fin del día, si bien le aconsejan que descanse antes de inhumar los restos a la mañana siguiente, ella, fiel a su convicción, vela el cadáver del difunto en esas cinco horas que restan, acompañada solo de una lámpara.

III.

            A partir de ese momento de soledad, Carmen se suelta a decirle en tiempo presente a un Mario ya incapaz de responder, todas aquellas cosas que no ha tenido el valor de plantear mientras éste vivía, mediante un soliloquio que resume todas las frustraciones y la infelicidad que aquélla ha padecido durante su matrimonio. Al poco, el lector va descubriendo cómo ha sido la vida conyugal, cargada de reproches y amonestaciones a la forma de ser y de pensar de su marido, en una suerte de catarsis donde Carmen arrostra sus insatisfacciones, como quien quisiera cobrar un cúmulo de facturas impagas y, a la vez, sin quererlo, desnuda sus bajezas.
La versión digital, gentileza de Epublibre, de un título localmente inhallable

IV.

            Así, Carmen encarna a la mujer retrógrada, clasista, conservadora, iletrada pero con ínfulas, envidiosa, educada en el respeto a la jerarquía y a la Iglesia, mientras que Mario es el catedrático filántropo, que ha intentado mantener coherencia entre su vida y su forma de pensar respecto de los pobres y desposeídos, aún a riesgo de sacrificar ascensos, beneficios económicos y de status social. Ambos representan lo que se dio en llamar el modelo de las dos Españas.

V.

            Rescato la oralidad de todo el texto, como también los detalles de las expresiones de su protagonista con que Delibes construye una obra sólida, reflejo de un tiempo de cambios al que no todos estaban bien dispuestos. Muchos de los argumentos que pone en boca de Carmen yo mismo los he escuchado cuando pequeño, en abuelos y tíos mayores a fines de los años ‘60. Fluida, amena y coloquial, es una novela fiel espejo de una época, indispensable para comprender la evolución histórica del pensamiento social.