Leteo, 2018
I.
No hace mucho leí una sucinta reseña
aparecida en un suplemento dominical. No conocía ni título ni autora. Poco después
tuve la ocasión de preguntar a la reseñadora su opinión personal y su
proverbial generosidad me facilitó el ejemplar. Fue una de las lecturas que me
acompañó en unas mini-vacaciones disfrutadas durante las fiestas de fin de año.
II.
Rimsky navega entre dos historias
que, a la vez, son sendos viajes. El suyo personal, tras alcanzar una beca que
le permitirá investigar y escribir una nueva novela, y la del personaje en la
que intenta basar ésta: el médico y erudito judío Maimónides, autor de la Guía de perplejos, donde el término
alude al descarrío o la confusión de aquellos quienes, no sabiendo interpretar adecuadamente
las enseñanzas de las Sagradas Escrituras, viven fuera del camino hacia la
sabiduría.
III.
Para ello, intercala ambos periplos:
el que Maimónides realiza en el siglo XII, obligado por el exilio impuesto por
la dominación almorávide que, partiendo de su Córdoba natal, lo lleva a parajes
como Fez, Tierra Santa, Alejandría, antes de afincarse definitivamente en
Fosfat, la actual El Cairo, y el que le presenta la vida a la autora, quien
participa de un congreso de Filosofía Medieval en Córdoba para iniciar su
trabajo, y cuyo derrotero posterior la conducirá a Croacia, pasando por el
Mediterráneo, Eslovenia, Belgrado y Montenegro previamente.
Rimsky en la playa de Necochea, Argentina, perpleja ante esos compañeros
IV.
¿Qué es nuestra vida, sino un camino
inconcluso? ¿Cuántas veces nos hallamos con claridad suficiente como para saber
cuál debieran ser nuestros pasos hacia determinada meta y, por retrasos
involuntarios, digresiones y avatares de distinto origen, terminamos abandonándolo?
Este es un poco el tema central del libro, que además abunda en reflexiones
sobre ciencia, filosofía y religión –sin abrumar- y detalles de la vida de
ambos protagonistas junto a los vínculos afectivos presentes en su entorno.
V.
Con una prosa directa, escenas que
fortalecen la trama y un juego de alternancia que mantiene la tensión narrativa,
Rimsky da vida a una novela fragmentada en que la persecución antisemita se
entrelaza con el sinsentido de la guerra entre vecinos; la búsqueda del
conocimiento, con las enseñanzas que brindan la ciencia y la filosofía y las aspiraciones
de gloria y renombre, con las necesidades básicas de los desposeídos. En
síntesis, un buen libro.
Pues la verdad es que este es un libro muy serio para mí. No me atrae el tema mucho tampoco. Lo que sí me gusta es la idea de la playa con libro.
ResponderEliminarBesitos caprichosos
Al principio, costaba engancharse, pero a medida que recorría las páginas se puso mejor. Tampoco te pierdes la panacea literaria.
ResponderEliminarLa playa se lleva bien con los libros, no importa qué contengan.
Besitos descansados.
Interesante recomendación que supone un viaje en el espacio y en el tiempo. Lo dejo anotado.
ResponderEliminarUn beso.
Dicen que no es lo mejor de Rimsky, pero no me ha parecido mal, por más que algunas explicaciones estuvieran de más para el profano en Sagradas Escrituras.
EliminarUn beso para ti, Rosa.
Un buen libro que toca muchos temas y que parece plantear reflexiones interesantes. Lo tengo en cuenta.
ResponderEliminarUn abrazo
Imagino que más de una vez nos hemos preguntado cómo compatibilizar ciencia, filosofía y religión, ¿verdad? Hay una serie de reflexiones interesantes sobre ello. Al menos, me ha puesto al descubierto la vida de Maimónides, lo que no es poco.
EliminarUn abrazo para ti, Lorena.