martes, 31 de enero de 2023

e-book 120. La construcción de la realidad. Solenoide, Mircea Cărtărescu

 


Impedimenta, 2017

Inconsciencia y arrepentimiento

               Abril de 2018. En la Feria del Libro local, al ingresar al stand del importador, su hijo sonrió ni bien me vio llegar y se movió para buscarme un ejemplar, que puso en mis manos no sin antes advertirme que no perdiera tiempo porque se estaban vendiendo como pan caliente. Ante su atónita mirada, decliné la oferta aduciendo escasez de espacio e incomodidad de desplazamiento con semejante volumen en mano. Él ignoraba que ya me había hecho de esta versión digital días antes; yo ignoraba cuánto habría de lamentar no haber aceptado su proposición, ahora que se hallaba agotado. Por fortuna, una joven amiga supo de mi emocionada lectura y rescató –y ofreció- un último ejemplar sito en su librería de confianza. Gloria y loor, entonces; agradecimiento infinito para la Arquitecta.

Temática

                El narrador anónimo, un docente de Lengua Rumana en una anodina escuela de las afueras de un triste y melancólico Bucarest, repasa su biografía usando sus cuadernos de notas que, a manera de diario personal, reflejan los vaivenes de su vida. Mientras detalla su abúlico acontecer, que se reparte entre su casa con forma de barco y su actividad docente, se inicia una segunda narración de carácter onírico, que recoge los sueños, alucinaciones, fantasmagorías y apariciones que, por lo general, toman lugar de manera nocturna. Así, se entremezclan tres planos: el biográfico familiar, el cotidiano del docente y el de las ensoñaciones.

Estructura

               A lo largo de cincuenta y un capítulos de diversa extensión, divididos en cuatro partes, el lector asiste a una descripción minuciosa del cotilleo en la sala de maestros –con su secuela de amores y bajezas varias- y de sus personajes más sobresalientes; de cómo ha sido la historia de vida del maestro -sospechando la muerte de un hermano gemelo-, sus mudanzas, sus miedos; de la existencia de un solenoide en los cimientos de su morada, junto a una torre que guarda elementos inquietantes, y todas las figuras que dan cuenta de una imaginación febril y exacerbada.


La versión digital, gentileza de EpubLibre

(Somera) Interpretación personal

               ¿Qué plantea el autor en este libro? Resulta un desafío realizar una síntesis abarcadora. En primer lugar, dispara la pregunta acerca de qué entendemos por realidad y cómo construimos ese concepto, puesto que dos o más personas aun conviviendo en el mismo espacio rodeados de los mismos objetos, suelen tener realidades distintas. Luego, ¿cómo se desdibuja esa misma realidad al incorporar fantasías, ilusiones y elementos propios del sueño, aun estando despiertos?; ¿vivimos en un sueño, o soñamos despiertos?

Por otra parte, está el tema de la salvación. ¿Qué demiurgo sádico ha decidido que, entre los eones de existencia del universo, sólo tengamos una vida mortal que, en tiempo astronómico, no representa más que ‘un nanosegundo en una mota de polvo de la infinita profundidad de la noche’?, ¿no deberíamos rebelarnos contra el dolor y la muerte, buscando una salida? Ésta no deja de ser una fuga metafísica hacia una cuarta dimensión imposible de ser pensada. Esa fuga que comienza con el teseracto de Hinton –una representación de aquélla a través de cubos-, continúa con la interpretación de los sueños de Nicolae Vaschide y finaliza con el enigma que guarda el manuscrito Voynich que, tomados en conjunto, no son otra cosa que elementos destinados a abandonar los límites que nos impone la vida en un mundo de tres dimensiones.

Párrafo aparte merece el solenoide, un aparato generador de campos electromagnéticos –un electroimán-. Aquí, Cărtărescu lo utiliza como elemento que permite levitar a los personajes –violando la ley de gravitación-, de manera que puedan flotar al igual que sus pensamientos e ilusiones, y también como un polo organizador que condensa experiencias, ordena la información y permite una reelaboración del texto.

Conclusión

               La totalidad de la obra exige concentración y lectura lenta. No es adecuado umbral para iniciarse en las letras del autor; es preferible hacer experiencia previa con otros títulos. En ésta se encuentran elementos recurrentes desarrollados por Cărtărescu en textos anteriores. No obstante, quienes decidan acometer su lectura no saldrán defraudados. El estilo es coloquial y directo; por momentos parece reiterativo, pero fluye con cierto ritmo desde la inicial descripción gris y ruinosa de un Bucarest bajo el dominio comunista hasta el mágico desenlace.

               Con alusiones y guiños a Kafka y a Borges, haciendo gala de un material imaginativo sin igual y con un capítulo de cierre que no solo no tiene desperdicio, sino que la alegoría final conmueve al lector hasta las lágrimas y le brinda sentido al resto de la narración, Cărtărescu construye una obra sublime, tan colosal como desmedida, tan grotesca como trascendente. Imposible de no recomendar. Probablemente, quedará entre mis cinco mejores libros de todos los tiempos.

jueves, 26 de enero de 2023

Fresco medieval. El nombre de la rosa, Umberto Eco

 


RBA, 1993

I.

               Esta relectura se efectuó por solicitud de lectores amigos que querían compartirla en grupo. Accedí a ello debido a que, hace más de una veintena, lo había leído en tiempo récord, sin prestar atención a detalles –v. g., los extensos párrafos en latín que pueblan sus páginas-, tan atrapante era su trama. Ahora, con más experiencia, lo encaré con la misma intensidad aunque con mayor profundidad.

II.

                El monje Adso de Melk recuerda, al fin de sus días, los sucesos que lo han tenido al menos como testigo principal cuando, siendo un aprendiz, tuvo que acompañar a su tutor, Guillermo de Baskerville, a una abadía benedictina aislada en los alpes italianos, con motivo de esclarecer una confusa muerte ocurrida a uno de sus monjes, en 1327. Ese monasterio era afamado por poseer una biblioteca con multitud de ejemplares, algunos de los cuales eran poco menos que rarezas.

III.

               La trama policial, que se vuelve trepidante a partir de la sucesión de muertes que tienen lugar, no oculta que el laberinto que constituye la biblioteca -a la que solo el bibliotecario y su ayudante tienen acceso-, es el terreno donde se dirimen puntos de vista encontrados y, tal vez, el origen de aquellas. Por otra parte, en la abadía tendrá lugar una reunión entre representantes del Emperador, a cargo de franciscanos, y otros que responden al Papa Juan XXII, que versará sobre la pobreza de Cristo –un eufemismo sobre el alcance del poder del papado-.

IV.

                Sin intentar realizar un análisis del texto, salta a la vista la existencia de cuatro personajes excluyentes: el investigador, un racionalista que cree no solo en la religión que profesa sino también en la incipiente ciencia; un abad, que representa el mundo de la iglesia e intenta mantener su prestigio y el equilibrio dentro del claustro; un enviado papal, con la misión de hallar argumentos para que el Papa siga aumentando su poder y un viejo monje ciego, que cree que existen lecturas que podrían crear confusión y cisma si viesen la luz.

V.

               Con un estilo coloquial y poco fluido, en este fresco medieval los planos se solapan logrando establecer una discusión acerca de la importancia del conocimiento para el ejercicio de la libertad, en oposición a la oscuridad que ejercen las instituciones –religiosas y políticas- para mantener su dominación. Una novela poliédrica, con muchos ítems que se prestan al debate, recomendable en conjunto. Existen versiones de la misma tanto en la pantalla grande como en series de TV. Y unas Apostillas, que el propio autor hizo conocer, donde se brindan los detalles de su construcción y, de paso, hace frente a aquellos críticos que tildaron a esta novela de un alarde de erudición.

sábado, 21 de enero de 2023

e-book 119. Epifanía oriental. Una rosa sola, Muriel Barbery

 

Seix Barral, 2021

I.

               Noblesse oblige. Primero, fue descubrirlo en la página de una amiga lectora, sin imaginar la historia que seguiría detrás. Luego de hacerme de esta versión digital, por razones personales –algo así como enviar un mensaje dentro de una botella-, lo busqué en papel y lo regalé. Arduo fue el camino hasta hallarlo y entregarlo. No se si su destinatari@ alguna vez lo abrirá. Si lo hiciera, ¿será capaz de entender el metamensaje?

II.

                Rose frisa la cuarentena y está llena de rabia. Criada por su abuela, su madre se ha suicidado cuando ella contaba con diez años, sumergiéndose en un cauce de agua con los bolsillos llenos de piedras –¿habrá sido un guiño al lector, por Virginia Woolf? -. Su padre, un japonés totalmente ausente en su vida, acaba de morir y la lectura de su testamento la obliga a hacer el viaje a Kioto, a un país desconocido del que nada sabe –ni le importa-, ni de su idioma, sus costumbres o su presente. Solo contará con la ayuda del asistente de aquél, Paul, un belga viudo con una hija, para ser acompañada durante su estadía.

III.

               Para que Rose adquiriera cierta mirada japonesa de la vida, Haru Ueno –el difunto marchante de arte- no ha tenido mejor idea que pedirle a Paul que le enseñara varios templos sitos en la ciudad –que sugiero recorrer cada uno de ellos a través de la Red- y el cementerio donde se hallan depositados sus restos. Con la ayuda de Sayoko, la servidora de Haru, y la conducción del móvil a cargo de Kento, la indiferencia y el gélido comienzo del derrotero de Rose dará paso a una epifanía y la posibilidad de un nuevo amor.

La versión digital, gentileza de EpubLibre

IV.

                La novela cuenta con una docena de capítulos que abren con una breve leyenda japonesa. En ellos, arces  y cerezos alternan con peonías y azaleas en la compañía diaria de Rose, doquiera que vaya. Las descripciones de los templos y los restaurantes a los que asiste junto a Paul son un reservorio de recursos que Barbery administra con sutileza, no exento de tonos recargados y propuestas iterativas. La historia, que se inicia como un pasado doloroso, termina por conducir hacia una novela romántica al uso.

V.

               De estilo fluido y ameno, Barbery pasea al lector por las inmediaciones de Kioto. Intenta mantener el tempo narrativo oriental, sin conseguirlo. Hacia el final, la novela se resuelve en un desenlace trillado y poco creíble. Entretenido y ligero, es una propuesta breve, adecuada para llevar de vacaciones.

lunes, 16 de enero de 2023

Violencia en primer plano. La cena, Herman Koch

 

Salamandra, 2013

I.

             El título esperaba años y decidí encararlo, no sin antes compartir una foto con mi selección de lecturas mensuales -que lo incluían- con un grupo lector. Despertó tantas adhesiones, que no sólo tuve que crear un subgrupo sino también armar una reunión virtual para el cierre. El fervor de los comentarios y la ansiedad generada por el debate final, convirtieron a esta lectura en un éxito arrollador y a mi en un gurú de referencias literarias –que no soy-. ¿No será mucho?

II.

          Los hermanos Lohman y sus esposas se reúnen para cenar en un restaurante selecto en Ámsterdam. El mayor de ellos, Serge, candidato a primer ministro, ha resuelto dimitir y blanquear un hecho de violencia en el que han participado uno de sus hijos y su primo, el hijo de Paul. La sorpresa es mayúscula, puesto que ni Paul ni su esposa están dispuestos a que ambos jóvenes sean juzgados –y condenados- por algo que sólo la familia sabe –no se los ha podido identificar-. Tampoco su propia pareja está de acuerdo: implicaría asumir, además, la pérdida de estatus y, con ello, renunciar a una vida acomodada. Entonces… habrá que actuar con rapidez.

III.

            Paul es el narrador en primera persona. A medida que transcurren las páginas el lector descubre los celos y la envidia que le carcome respecto del afamado hermano mayor, sobre quien ha ejercido actos de violencia en ocasiones previas. Haciendo uso del recurso de analepsis, Koch no solo detalla el hecho en que han incurrido los primos –basado en una historia real-, sino el carácter agresivo de Paul, debido a una enfermedad genética por la que debe medicarse –y no lo hace-. A este cóctel explosivo hay que sumar la manipulación de su esposa, verdadera instigadora, y un joven de origen africano, adoptado por Serge, que chantajea a los primos violentos.

IV.

                La obra no alcanzaría la relevancia que demostró tener para los lectores sin destacar su original estructura. Koch decidió narrar toda la historia en sendos capítulos que componen una cena: Aperitivos, Entrantes, Segundo, Postres, Digestivos y, claro, no podía faltar la Propina. De estilo coloquial y ameno, el ritmo se vuelve trepidante, con la tensión narrativa in crescendo hacia un final que, aunque previsible en gran medida, no deja de estar a la altura del resto del texto.

V.

            Párrafo aparte merecen las preguntas que dispara esta lectura. ¿Cuánto influye el clima familiar y el carácter de los padres en la educación de sus hijos?; ¿puede la institución escolar producir cambios positivos cuando el núcleo familiar no acompaña?; lo políticamente correcto, ¿no oculta muchas veces una hipocresía servil y utilitaria?; vivir en una sociedad tan reglada –como la neerlandesa y otras-, ¿no generará mayor violencia, como modo de canalizar cierta rebelión a las normas? Solo por llamar a la reflexión sobre estas cuestiones, vale la pena que el libro se lea.

miércoles, 11 de enero de 2023

Vivir en la marginalidad. Suttree, Cormac McCarthy

 

Debolsillo, 2009

I.

                Hace casi una década ya, dos de mis referencias lectoras coincidían en sus apreciaciones sobre las bondades de este material, momento en el cual, como suele ocurrir, al ir en su busca se hallaba agotado. Hubo una espera de más de un año antes de que apareciera en el mercado de usados. El estado de este ejemplar era impecable, razón por la que debí afrontarlo como si fuera nuevo. Otro título del mismo autor, bastante afamado, no había colmado mis expectativas; pasados los años, decidí brindarle esta nueva oportunidad.

II.

             El protagonista, Cornelius (Bud) Suttree, es un hombre de edad desconocida, que ha abandonado una vida acomodada, con mujer e hijos, para establecerse sobre una casa flotante en Knoxville, sobre las márgenes del río Tennessee. Su única fuente de ingresos proviene de su pesca, la que ofrece en el mercado local. Su vida está inmersa en una supervivencia exigua, y comparte las vicisitudes cotidianas con otros personajes tan extraños como él.

III.

               Parco en el hablar, generoso con los demás, buen consejero, Suttree intenta mantenerse alejado del alcohol y las drogas. Hombre de poca fortuna con las mujeres, sus amigos y compañeros de aventuras son todos marginales como él mismo: un viejo ferroviario, un chatarrero, una curandera y el jovenzuelo Harrogate quien, con su inexperiencia y alocadas ideas, pondrá cierta dosis de humor en medio de la tragedia que viven estos indigentes. Como fuese de esperar, la policía y la cárcel son elementos omnipresentes y parte de su diario vivir.

IV.

             Ambientada en 1951, la novela participa de la lenta cadencia del río, verdadero nervio motor del acontecer de los personajes, quien con su eterno fluir convoca a una relación recíproca con la vida humana. En ese aspecto, McCarthy acierta en que aquél rija los tiempos narrativos. Por otra parte, rescata a un hombre que, más allá de las diferencias sociales, mantiene sus principios a rajatabla, como ejemplo de vida para el resto, que reconoce en él un liderazgo silente.

V.

               Con una prosa poética rayana en el más sublime lirismo, escenas de alto contenido emotivo y una construcción psicológica apropiada de los personajes, la novela no solo se disfruta, sino que dispara interrogantes acerca de la vida de los desposeídos, de sus carencias y de sus debilidades tanto como de su solidaridad entre pares y el esfuerzo por salir de ese estado de ignominia e indiferencia social que reviste la pobreza extrema. Una novela carnosa y emocional. Literatura de la buena.

viernes, 6 de enero de 2023

e-book 118. Aprendizaje e iniciación. Actos obscenos en lugar privado, Marco Missiroli

 

Salamandra, 2018

I.

                Un análisis poco común de este libro hizo que lo apuntara, pero cuando volví a buscarlo ya había desaparecido junto con su autor. No obstante, decidí incluirlo entre mis lecturas veraniegas pues combinaba magníficamente cierto grado de frescura en su contenido con mi curiosidad hacia la actualidad de las letras de origen italiano. Máxime, cuando habría de compartir viaje con otras obras que requerirían mayor concentración.

II.

                El protagonista de esta novela de aprendizaje e iniciación –sentimental y sexual- es Libero Marsell, quien narra en primera persona su historia desde el momento que, con doce años de edad, descubre a su madre practicando sexo oral con el mejor amigo de su padre, hasta la muerte de aquella y el nacimiento de su primer vástago. El elemento disparador no parece haberle provocado mayores consecuencias psicológicas, salvo una desmedida búsqueda de satisfacción auto y heterosexual.

III.

               En el camino de hacerse adulto, Libero tendrá suerte. Una bella mujer varios años mayor a quien el niño le cae simpático será su consejera y confidente; se iniciará sexualmente con la hermana de su amigo, una diosa de ébano; se mudará a París donde se cruzará con Sartre y frecuentará su cafetería a su muerte; volverá a Milán donde, mientras termina sus estudios de derecho se ganará la vida en un café de los Navigli y cerrará el ciclo robando y casándose con la novia de uno de sus viejos amigos.


La versión digital, con la portada de su edición en italiano, gentileza de Biblioteca Secreta

IV.

                Missiroli no ahorra descripciones puntillosas de cada encuentro sexual, con cierta carga de erotismo, como tampoco elude referencias culturales: allí estarán El extranjero, de Camus, y El desierto de los tártaros, de Buzzati; también Full Metal Jacket, de Kubrick y Bailando con lobos, de Kevin Costner; Pink Floyd… Si bien todas ellas son gratas a los lectores, su profusión convierte al texto en algo sensiblero y poco creíble.

V.

               De estilo ágil, coloquial y fluido, dividido en partes que responden a cada etapa de la vida, este bildungsroman que deambula entre el Trocadero, el Marais y el Campo de Marte, con la Sorbona de fondo y tantas otras alusiones al mejor París y al rico Milán, se lee rápidamente dejando poco más que buen sabor final. Una propuesta más que aceptable para llevar de vacaciones o para leer mientras se viaja.

domingo, 1 de enero de 2023

Turismo sexual. Plataforma, Michel Houellebecq

 

Anagrama – Página 12, 2012

I.

                Es difícil sustraerse a la obra del autor francés. Todo el tiempo intenta involucrar, provocar, convocar al lector a que tome posición acerca de lo que plantea. Creo que en ello radica tanto su rechazo como la devoción de muchos. Impide la no participación. Egocéntrico por naturaleza, polémico a ultranza, Houellebecq consigue capturar la atención en sus escritos merced a una pluma ágil y brillante, no exenta de cierto cinismo.

II.

                Michel, el protagonista, es un burócrata cuarentón, poco sociable y de buen pasar, quien tras la muerte violenta de su padre y hastiado de una vida sin rumbo decide prodigarse un viaje hacia Tailandia en busca de aventuras y placeres sexuales. Durante el tour conoce a Valérie, una joven atractiva, ejecutiva de la empresa responsable del mismo, que se encuentra de vacaciones. Al regreso, inicia junto a ella una relación en la que el sexo es el núcleo central.

III.

               Poco después, Valérie y su jefe Jean-Yves pasan a una gran corporación de agencias de viajes, con el objetivo de desarrollar el turismo en una suerte de paraísos poco o mal explotados. Es durante un viaje a Cuba en que Michel propone abiertamente el turismo sexual asiático, ofrecido al público alemán, pues los franceses son reacios a la trata de mujeres y la prostitución. El proyecto resulta exitoso hasta que la intolerancia religiosa del fundamentalismo islámico local provoca un atentado de proporciones mayúsculas.

IV.

                El nervio conductor de esta novela se basa en que la sociedad de consumo actual, así como acentúa la desigualdad entre estratos sociales, conduce al aburrimiento y la abulia, a la pérdida del apetito sexual en los sectores de mayores recursos, que necesitan cada vez más el incremento del consumo o la provisión de adrenalina que procura la vivencia de situaciones extremas, como únicos paliativos contra el desencanto. Lo interesante es que Michel –alter ego del autor- se inscribe entre éstos y no por ello deja de criticarse con lucidez.

V.

               En un estilo ferozmente directo, con descripciones minuciosas de sexo explícito, escenas procaces que concitan el erotismo y el asco por igual, y planteo de argumentos sociológicos con cierto fundamento –por más que su óptica provenga desde un incipiente nihilismo-, Houellebecq concibe una obra donde la historia de sus protagonistas es la excusa para desnudar una realidad social más profunda: la falta de estímulos para seguir viviendo. Un libro de ritmo trepidante, que llama a la reflexión sobre nuestra forma de vivir y las perspectivas que depara el futuro. No dudo que habrá de convertirse en un clásico de la literatura en breve. Indispensable para todo buen lector.