domingo, 21 de febrero de 2021

Trilogía del Baztán. 2. Legado en los huesos, Dolores Redondo

Destino, 2015

I.

            En este segundo episodio, la inspectora de la Policia Foral Amaia Salazar se ve involucrada en una serie de asesinatos cometidos por distintos criminales quienes, luego de perpetrarlos, se suicidan al poco, dejando como única señal un mensaje: ‘Tarttalo’, en clara alusión al mítico personaje del imaginario popular vasco, quien solía comer o morder una parte de sus víctimas. Ella deberá descifrar su significado para hallar al inductor responsable.

II.

            Pero eso no es todo en la vida de la protagonista. A punto de dar a luz, el lector transitará parte de su tenebrosa historia familiar, la relación con sus hermanas y tía, la recuperación de la casona que perteneció a su abuela y la imagen de una madre desquiciada, que vuelve una y otra vez a hacerse presente, sin eludir su nuevo rol de madre y sus miedos sobre la crianza.

III.

            Con elementos tomados de la mitología navarra –la oportuna aparición del hada del bosque; el legendario basajaun que auxilia ante los peligros- y haciendo uso de los tópicos que son parte de los relatos policiales –el compañero apartado que desea integrarse nuevamente al equipo, la seducción ejercida por el joven y apuesto juez de instrucción, el sagaz asistente a quien no se le escapa nada-, Redondo construye una novela de género que se inicia con un hecho acaecido en el volumen anterior y deja abierta la puerta para que una nueva historia comience en el venidero.

IV.

            De estilo coloquial, a diferencia de la primera, esta novela intercala apropiadamente los diversos planos que la atraviesan, logrando que la tensión narrativa vaya en aumento con el correr de las páginas. Aunque el desenlace sea tan abrupto como su antecesor –en medio de circunstancias demasiado adversas como para que su protagonista salga tan airosa-, el conjunto está más equilibrado y la lectura fluye con comodidad y rapidez. Una propuesta interesante para llevar de viaje o de vacaciones.

 

13 comentarios:

  1. Fue difícil aislarse de esta trilogía, del protagonismo mediático cuando fue el cine el que apostó por ella, el Planeta de hace unos años y ahí sigo yo con esta autora dentro de mis pendientes. Un lugar que se presta al misterio, historias que llevan siglos entre los lugareños... un lugar que me gustaría visitar en directo más que por las páginas que nos llevan a él. Aunque será más fácil la lectura que la visita por los tiempos que corren. Un abrazo.

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    1. Creo dejar en claro que éste me ha gustado más que el anterior. Maneja mejor la tensión narrativa, alterna acertadamente la trama policial con la historia familiar, etc.
      Y me ha descubierto Aínsa, en Huesca, un lugar bellísimo por lo que he visto. Ya por eso solo, ha valido la pena leerlo.
      Un abrazo para ti, Ana.

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    2. Ainsa merece la pena,si. Espectacular.

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  2. Oh, querido Marcelo. Esta vez no estamos de acuerdo. Según pasaron páginas le fui cogiendo manía a la Amaia hasta que no pude con ella. Lo del juez es que es tan básico todo.
    Aunque tengo que ser honesta, la peli de esta parte me gustó bastante.
    Del tercero no podré opinar pero no lo lamento.
    Besitos tozudos.

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    1. Vamos, Guapa, que la protagonista parece un sabelotodo pero tiene un costado vulnerable (algo le ha tenido que dejar).
      No he visto ninguna de las pelis. Veremos cómo concluyo en breve con la trilogía.
      Besitos contemporizadores.

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  3. ¡Hola Marcelo! Yo sí que coincido contigo, esta segunda parte, no es la que más me gustó de las tres (el tercero me gusto mucho) pero no me defraudó. En general disfruté mucho con esta trilogía. Quizás el lado que más me atraía de la trama era esa relación entre madres e hijas y la tía y esa ambientación creada Del Valle del Baztán. A ver que te parece el tercero y el cierre de la saga. Espero que no te defraude
    Besos

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    1. Hola, Marian! Por lo que percibo, Redondo está yendo de menor a mayor. Es posible que el último volumen esté aún mejor.
      Ha despertado mi curiosidad sobre la España Medieval, ésa que aún puede vivirse en algunos de sus pueblos. Debe ser que nuestra geografía abunda en paisajes y panoramas; la de España, abunda en Historia e historias.
      Besos para ti!

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  4. Hola Marcelo Leo poco y nada me tiene atrapada Netflix
    una buena entrada abrazo desde Miami

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    1. Al contrario que yo, que no miro TV.
      Gracias por tus líneas.
      Abrazo.

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  5. Hola Marcelo, eso personajes Basajaun (basoa, el bosque, jaun, señor) no son tanto, que también, personajes de la mitología vasca, sino son parte de las deidades de la antigua religión vasca, relacionada con los elementos naturales, así por ejemplo akerbeltz, al que los inquisidores hicieron el diablo ( de ahí la palabra akelarre) es un elemento de las deidades naturales vascas, como Mari, que vive en la cueva del monte Anboto y Txindoki, las Lamias... Es un mundo fascinante...
    gracias
    un saludo

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    1. Maestro! Qué sería de mi si no estuviera Ud. para esclarecerme! Imagino que todo el acervo cultural vasco, con sus deidades y mitos, debe ser riquísimo. Incluirlo en estas novelas me pareció un acierto. Y como he señalado, despertó mi curiosidad por los reinos de Navarra y Aragón, con sus aldeas llenas de historia.
      Un abrazo grande.

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  6. He leído la trilogía, es muy entretenida pero nada más. Una de las cosas que menos me gusta es el asunto de las deidades y mitos vascos, que son exactamente eso, mitos. Mitos convertidos en la base de un nacionalismo identitario como es el vasco (casi todos responden a lo mismo, pero este encima lo difunde la izquierda, una pena).
    Con la trilogía acabé mi relación con Dolores Redondo.

    Abrazos.

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    1. El primero me ha convencido menos; éste, un poco más. Para quienes estamos fuera del área de los hechos, los mitos y deidades locales despiertan la curiosidad del lector. Claro que si esa parte del acervo cultural de una región se utiliza con fines políticos, sea de izquierda o derecha, no deja de ser lamentable porque solo beneficiaría a una parcialidad y no a la totalidad de la sociedad.
      Lo rotundo de tu comentario parece ir en ese sentido, como si la autora persiguiera otros fines que no son únicamente los literarios. Algo a tomar en cuenta en la lectura venidera.
      Gracias por el aporte.
      Un abrazo!

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