Siruela, 2010
I.
Parece haber una creencia persa que
indica la existencia de una piedra a la que, si le contamos todos nuestros
sufrimientos, desgracias y miserias, la piedra las absorbe y un buen día,
¡pum!, la piedra explota y así quedamos liberados. Sería bueno poder contar con
una. Pero, ¿qué pasaría si convertimos a un ser humano, moribundo, en esa
piedra?
II.
Hace más de dos semanas que un
guerrero, héroe de la Yihad, se encuentra en estado vegetativo por alojar una
bala en su nuca, producto de una reyerta doméstica. Su mujer, madre de dos
niñas, reza por él, le atiende diariamente con suero y colirio para los ojos,
mientras le habla. Aún sin saber si él la oye, se afana por sus cuidados. Pero
ya no da más; el Corán no es suficiente contención para una mujer desbordada
por la situación, a quien los familiares han abandonado a su suerte y que
expone su vida en medio de balaceras.
III.
Así, convierte en ‘piedra de la
paciencia’ a su marido, reprochándole en principio haber consagrado su vida a
la Guerra Santa –sin importarle esposa e hijas-. Pero no se queda allí; sigue
desgranando todo lo acumulado a lo largo de diez años de matrimonio: sus
miedos, sus frustraciones, sus anhelos y, lo mejor, le revela sus secretos
ocultos. Mediante esta catarsis, el
lector asiste a todas las vejaciones y actos de violencia de género perpetrados
tanto por el marido como por su familia política, quien solo ve en ella un
objeto para saciar la necesidad sexual y procrear descendencia.
IV.
Rahimi compone una denuncia sobre el
rol de la mujer bajo el Islam, con una protagonista y un par de personajes
secundarios que fortalecen el relato principal. Además, aprovecha la narración
para exhibir el sinsentido de la guerra fratricida, pues la sitúa entre los
escombros de un pueblo, en medio de enfrentamientos armados entre distintos
bandos, poniendo de manifiesto cuánto juega el pellejo su protagonista para
cuidar a su marido.
V.
En estilo crudo, aunque con cierta
dosis de lirismo, Rahimi construye un relato contra la guerra, el fanatismo y
la opresión de las mujeres, sea que se lleve a cabo en cualquier geografía y
bajo cualquier religión. Es un libro breve pero intenso. Para tomar en cuenta.
Hola Marcelo
ResponderEliminarMuy interesante la novela que presentas, no la conocí. La forma en la que el escritor busca analizar ese mundo me parece del todo atractiva para leerla, pareciera, por lo que cuentas, algo como “Cinco horas con Mario” de Delibes, pero de tema aun más duro, a lo bestia... Esos libros son los que suelen merecer la pena.Los que meten bisturí sin miedo...
Hubo una época que leí bastante novela de , digamos, países de mayoría musulmana , que no es una división precisamente muy literaria por mi parte, pero no es una literatura que aparezca excesivamente en las librerías occidentales, más allá de Naguib Mahfuz o Maalouf. En aquella época la novela que más me atrajo era una novela similar en lo que cuenta a la que tú has reseñado, más en el tema de la mujer en el mundo árabe que en el resto de la temática, es un libro (pequeñito) que me gustó mucho que se titula “Mujer en punto cero” de Nawal Al-Sadawi. Compré varios libros de esa "literatua de paises islámicos", que me gustaron -ahora tengo uno que me llama mucho la atención, que es “las ciudades de sal” de Munif , pero me la quita porque es una septología que no creo que la publiquen entera aquí);(. De todas formas el autor de esta literatura que siempre será especial es Mahmoud Darwish, el poeta palestino, muy querido para mí.
Gracias por la sugerencia y tu reseña
un abrazo
Hola, Wine.
EliminarNo he leído -aún- la obra de Delibes que citas, aunque me espera en versión digital. En cambio, el de Al-Sadawi lo tengo apuntado para cuando se digne llegar -si es que lo hace-. Tanto de Munif como de Darwish, apunto porque ni noticias.
Yendo a lo que comentas de la literatura 'musulmana', además de los autores que nombras, sólo he pasado por las páginas de Pamuk. Particularmente interesante me ha resultado 'El castillo blanco' -del que algo he dicho en su momento y puedes ver aquí a la derecha-. Inicialmente, se llamó 'El astrólogo y el sultán', más acorde con el contenido. Sospecho que nos llegan a cuentagotas historias bastante 'occidentalizadas' de ese mundo tan diferente.
En referencia a este libro, resulta crudo conocer a través de la voz de la mujer los tormentos padecidos por ella, infligidos por quien no puede responder. Te advierto que el final es tan sorpresivo como duro. Es que, parece, no puede ser de otra manera entre fundamentalistas.
Gracias por darte una vuelta por aquí y por los datos de los diversos autores.
Un fuerte abrazo!
Pecado mío, olvidar a Pamuk, que me gusta mucho, pero de alguna forma, sí, quizá lo he identificado/olvidado con el algo mas occidentalizada Turquia
EliminarUn abrazo
Mientras leía tu reseña iba pensando, igual que Wineruda, en la maravillosa obra de Delibes, Cinco horas con Mario (que he leído y he visto en teatro con la impecable Lola Herrera).
ResponderEliminarSiempre ha habido mujeres que calladas en el supuesto "reino del hogar", han acumulado rencor hacia sus maridos y, a veces, encuentran la oportunidad de expresarlo e incluso tener una segunda vida tras la muerte de su tirano.
Parece interesante la novela.
Abrazos!!
La novela es interesante aunque... si no recuerdo mal... tú has visto la peli basada en este libro y dirigida por el autor!
EliminarSi me permites, el éxito de este libro radica en cómo Rahimi entrelazó la angustia y la desesperación de su protagonista con esa liberación que va surgiendo, que se acentúa en cada palabra proferida y resulta irrefrenable.
Es un buen libro y, además, breve. Échale el ojo y nos cuentas.
Un abrazo grande, U-to!