Alfaguara, 1995
I.
Habían pasado cuatro años desde su
adquisición en una librería de usados y rondaba por las inmediaciones del
escritorio. Es que en el afán de lograr espacio, muchos de los libros deambulan
intentando hallar el suyo definitivo. Dada la espera y por tratarse de cuentos,
decidí incorporarlo en medio de otras lecturas.
II.
El libro consta de un prólogo, una
docena de relatos de distinta extensión y un par de artículos periodísticos
relacionados con la observación que Bowles ha hecho de la vida en el desierto
marroquí, donde se afincó definitivamente desde 1947 hasta su muerte.
III.
Un grumete de a bordo al que nadie
incluye en sus conversaciones; una santa que decide materializarse siglos
después; una pareja en viaje de bodas en medio de parajes insospechados; un
ladrón de serpientes que sufre una metamorfosis; un espíritu que encarna en
seres humanos; una bella joven marroquí que decide andar mundo; una reunión
familiar de Navidad, entre otros, no parecen tener conexión entre sí. Sin
embargo, en todas las historias existe una circunstancia puntual que
desencadena una serie de hechos que, de no haber tenido lugar, muy
probablemente el derrotero a seguir fuese otro. Es la aplicación del efecto mariposa, enunciado por Edward
Lorenz según la Teoría del Caos para sistemas dinámicos, por el cual ‘el breve aleteo de una mariposa en un punto
del globo puede hacer sentir sus efectos en el otro lado del mundo’. Todo
aquello que es factible de cambio, muchas veces se vuelve imprevisible.
IV.
Párrafo aparte merece el relato El tiempo de la amistad, en el que una
docente de origen suizo reparte su actividad estacionalmente entre Berna y
Marruecos. Ambientado en la posguerra de independencia, el texto va dando
muestras de los sustanciales cambios en la relación entre nazarenos (occidentales) y musulmanes a través de la interacción
entre Fräulein Windling y un
desarrapado niño local, Slimane. Lo que comenzó como una relación amistosa
terminará con la partida de la maestra a sugerencia de un capitán francés. Pero
lo que permite entrever es el pasaje de la convivencia pacífica entre dos
creencias a la intolerancia bélica.
V.
En estilo coloquial y fluido, los
relatos se leen rápidamente debido a una prosa directa y por momentos poética,
con un mínimo de elementos y descripciones atinadas. Y el Sahara… ese desierto
omnipresente, su sol abrazador y la vida en los oasis ponen un condimento extra
a cada historia. Un libro que despierta curiosidad por esas tierras y sus
gentes.
Ah pues, al desierto con Paul ya había ido bajo "el cielo protector", que la leí cuando era pequeña. No se me ocurrió volver pese a que fue una buena experiencia. Espero segura que en estos relatos encontraría aventuras como aquella que me gustaría. Tomo nota.
ResponderEliminarBesos
Fue una buena experiencia de lectura; máxime, porque no soy de leer relatos. Pero al no haber pisado tierra marroquí, al menos me ha permitido viajar un poco y conocer algo de su geografía y de sus pobladores. Espero que te guste, si lo lees.
EliminarBesotes, Maja.
Hola Marcelo
ResponderEliminarBowles, una de mis asignturas pendientes...y como me gustan los cuentos, mucho, no es mala idea empezar por ellos; más que nada porque, injustamene lo sé, lo juzgo por aquella pélicula. Es lo que tiene el cine, que da notas que no deben ser dadas, puntuan lo que no debe puntuarse de ese modo.
no sería mala idea por mi parte, partir de estos textos
gracias
un abrazo
Hola Wine
EliminarHe tenido la fortuna de no ver película ni haber leído el afamado libro de Bowles, lo que me ha dado un poco más de aire para opinar de primera mano.
Sí, considero oportuno comenzar con esta serie de relatos si tienes una asignatura pendiente con él. No te defraudará.
Recibe un fuerte abrazo.
Igual que Wineruda, también es uno de esos eternos candidatos, tengo su célebre "El cielo protector" por mis estantes. El que nos presentas de relatos, parece reunir lo mejor de su talento, esas descripciones del desierto, en tono poético, deben de ser fascinantes...
ResponderEliminarUn abrazo pibe!
Yo también tengo 'El cielo protector' para leer, pero me decanté por éste por ser de relatos, género que no frecuento.
EliminarNo podría aseverar que fuese lo más granado de Bowles en materia de relatos, pero me ha gustado, lo que no es poco.
Creo que a ti y a mi aún nos queda atravesar el Sahara. Espero tener la oportunidad de invitarte a ello.
Recibe un fuerte abrazo, Paco!
Me cuesta mucho leer cuentos, si tengo que elegir siempre opto por la novela, sin embargo he tenido buenas experiencias con relatos cortos, así que esta puede ser una opción interesante puesto que también es un autor pendiente de lectura.
ResponderEliminar¡Ay! el desierto..., me atrae literariamente, poco en la realidad porque no soporto el calor.
Un gran abrazo!!
Conozco bien aquellos gustos literarios que compartimos, U-to, y los relatos no son nuestro fuerte. Pero sí, éste podría ser una opción para adentrarse en las letras de Bowles.
EliminarYo tampoco soporto el calor, pero le he propuesto a futuro a Paco a ver si somos capaces de atravesar nada menos que el Sahara.
El desierto siempre es una buena excusa para meditar y conocerse.
Un gran abrazo para ti!