Seix Barral, 2017
I.
Lo apunté y adquirí en base a un
extenso comentario del libro, en la Red. Lo maravilloso fue verlo en una
fotografía en la que Utopía, una excelente lectora, presentaba otro título. No
dudé en proponerle que, cuando lo dispusiera, pudiéramos hacer una lectura
conjunta del mismo, cosa que ha ocurrido estas últimas semanas. Considero que
el intercambio nos ha enriquecido.
II.
Este libro posee una Introducción,
escrita por su propia autora, en la que da aviso de cómo se compone el libro,
el material incluido en cada parte y advierte que el presente es una
compilación de trabajos que desde el 2011 al 2015 expuso en diversas conferencias,
medios, etc. En ese aspecto, el conjunto resulta algo ecléctico; cada uno de
ellos bien podría ser leído separado del resto pero, al estar surcado por una
mirada netamente femenina, ha convertido ello en el nervio conductor y común
denominador de la obra.
III.
Además, está estructurado en dos
partes bien disímiles. La primera reúne, bajo el título de marras, una serie de
ensayos acerca del rol de la mujer en el arte y su oposición con la mirada masculina.
Inicia con un análisis de pinturas de Picasso, Willem De Kooning y Max
Beckmann, quienes exhiben su visión de la mujer y cómo impactan en sus
observadores. Prosigue con el valor mercantil del arte –haciéndose eco en la
obra de Koons-; en la pintura de Louise Bourgeois se trata la relación entre
artista y observador y la violencia en el arte; en la obra de Anselm Kiefer se
repasa el Holocausto judío; hay contrapunto entre las fotografías de
Mapplethorpe y el cine de Almodóvar; un particular enfoque de la coreógrafa
Pina Bausch según Wim Wenders; la importancia del cabello en la sociedad
moderna; el análisis de Sontag sobre la pornografía; la eclosión del lado femenino del varón en el relato de
Knausgard; la experiencia de la autora como tallerista de escritura creativa en
un centro psiquiátrico y los avatares personales como paciente de
psicoanálisis.
IV.
En la segunda, bajo el título ¿Qué
somos?, se abordan temas más relacionados con el lenguaje, la psicobiología y
la neurolingüística. Partiendo del uso de la primera, segunda y tercera persona
en los textos, continúa con el mundo personal de las percepciones; el debate
sobre el prejuicio contra las mujeres en diversas áreas y el lugar que ocupa la
imaginación; las presunciones sobre la histeria; la mirada sobre el suicidio; el
impacto de una obra de arte en nuestras emociones; el significado del recuerdo
en el arte; las dificultades en el diagnóstico de enfermedades cerebrales y,
finalmente, repasa los pseudónimos de Kierkegaard y sus propuestas.
V.
En un estilo que alterna lo
académico y técnico con las reflexiones que disparan el arte, la ciencia y la
mirada femenina de ambos, Hustvedt nos brinda su propio enfoque tanto de las
apreciaciones artísticas como de las enfermedades que, con base neurofisiológica
y aún con diagnóstico médico, están emparentadas con el lenguaje. En suma, un
libro con altibajos, cuyo contenido puede leerse de manera independiente.
Agradezco a Utopía quien, con sus aportes, me ha brindado una óptica distinta.
Lo que ella ha comentado de este mismo título, que ahonda sobremanera, podéis hallarlo aquí.
Hola. Pues no me veo con esto, la verdad. Intenté leer una novela suya y ya me resultó árida y densa así que aquí me parece que eso se acentúa. Añadamos que estos temas ya me saturan un poco por su omnipresencia. Y puestos a ser sinceros, la autora me cae mal.
ResponderEliminarBesitos perezosos.
Imaginaba tu respuesta. No hay lugar para dos amantes de Paul Auster, ja, ja.
EliminarLo bueno de tu comentario es que tu mirada sigue siendo certera. Mis libreros más allegados -en quienes confío como buenos lectores-, aunque expresan que sus escritos son acertados, tildan a su prosa de densa y rebuscada.
Besitos sin celos.
Pues si amante y libreros están de acuerdo, es que tienen razón, jeje.
EliminarBesitos
Querido Marcelo, la lectura conjunta ha sido una delicia en cuanto a ritmo de lectura (yo un poco más lenta que tú pero poca cosa), comentarios intercambiados (en especial porque siempre ves otra lectura que te hace pensar) y acompañamiento (no sé si lo habría leído tan pronto, me hubiera encallado en sus tecnicismos).
ResponderEliminarAsí que una grata y rica conversación al compás de la lectura de esta mujer brillante que se atreve con todo, o casi todo, y que demuestra solvencia aunque alguno de los ensayos sea pesado de leer.
Gracias por la propuesta y por llevar la batuta.
Un gran abrazo transatlántico.
Nada debes agradecerme. El placer de la lectura compartida ha sido también mío; tu mirada de mujer ha enriquecido la mía a través de tópicos en los que, sin tu aporte, quizás no hubiera reparado más profundamente.
EliminarHa sido un libro que se ha prestado para el debate y el disenso; sin embargo, nos hemos hallado afines, lo que no deja de sorprenderme.
Ambos hemos mantenido el ritmo de lectura, sin dejar nuestras obligaciones cotidianas, lo que ha fortalecido los comentarios y las percepciones.
En otro orden, me gustaría creer que pertenecemos a un club muy particular, que no extiende credenciales de membresía o de pertenencia alguna; basta con leernos para reconocernos como afiliados: el de buenos lectores. Contigo, y con todos los que se dan cita en este espacio, en el tuyo y en los de ellos, componemos un grupo variopinto, de edades distintas, pero todos amantes de las letras. Esas letras que nos unen, más allá de las geografías.
Otro gran abrazo para ti, Laura.
Me siento partícipe de ese club tan especial, el club de las letras y de los buenos libros.
EliminarAbrazos!!
Acabo de leer el último libro de Siri Hustvedt, "Recuerdos del futuro", y en él también está muy presente la neurociencia y la psiquiatría. Se trata de una obra a medio camino entre la novela y la autobiografía que me ha resultado un tanto caótica. Debo reconocer que me gustan más sus novelas en sentido estricto.
ResponderEliminarUn beso.
Y algunos de mis libreros dicen que sus novelas son algo densas...
EliminarEs un libro irregular, con ensayos interesantes alternando con otros más técnicos.
Un beso.
Parece atractivo el libro, me gustan los escritores que hablan de pintura, no sé si en una suerte de écfrasis o en tratados casi sociales y artísticos como Berger. También últimamente he leído algo que pudiera parecerse por sus análisis del arte, del mundo, de la vida, quizá no del lenguaje, de Davenport y me ha resultado muy atractivo, así que le daré una oportunidad a Siri, si el libro baja de precio o cuando lo haga...
ResponderEliminarGracias
Hustvedt comienza con algo de écfrasis para explicar cómo ha sido la mirada de los pintores sobre el universo femenino, aunque después cambia un poco, al abordar otras áreas.
EliminarLa segunda mitad es menos fluida y más académica, abundosa en tecnicismos que retardan la comprensión y, por ende, la lectura. Sugiero que lo hojees antes de hacerte de un ejemplar.
Un gran abrazo, Maestro.
Me atrae el tema de la psicobiología y la neurolingüística.
ResponderEliminarEn cuanto a la autora, la tengo pendiente. De hecho hace ya tiempo que tengo elegido libro (una novela, en este caso) para estrenarme con ella: El mundo deslumbrante. Incluso he estado a punto de empezarlo en un par de ocasiones pero parece que es una escritora maldita para mí pues en ambos casos tuve que hacer parones lectores por falta de tiempo. Cuando retomé en ambas ocasiones la lectura, lo hice con otro libro y otro autor, pues soy un poco de ir leyendo lo que me va apeteciendo en cada momento. El próximo mes estará por mi tierra recibiendo el premio Princesa de Asturias de las Letras. Supongo que sería un buen momento para intentar romper la maldición.
Un abrazo
Sí que lo sería, Lorena. Aunque no me atrevo a sugerirte un título; sólo he leído un par y mi experiencia advierte que no fluyen fácilmente.
EliminarLos ensayos sobre los temas de tu interés están muy bien; sólo que para un profano como quien escribe algunas cosas se le han vuelto abstrusas. Quizá tu preparación académica te allane algo más el camino.
Yo también soy un lector nómada -así me definió personalmente Andrés Neuman-, por lo que entiendo perfectamente tu explicación.
Un fuerte abrazo para ti.