Destino, 2014
Verano.
Momento de esparcimiento y de necesidad de dejar atrás un año destinado al
olvido. O casi. Merced a los buenos comentarios –en general- de esta trilogía,
me hice de los ejemplares a fines de 2015 a sabiendas que habrían de esperar.
La abulia que procura el encierro y mi escasa frecuencia en el género policial
decidieron su suerte. Los restantes volúmenes que la componen aparecerán en
meses venideros.
I.
Amaia Salazar es inspectora de la Policía
Foral de Navarra. Debido a su sagacidad, es puesta al frente de una
investigación de homicidio de una adolescente cuyo cadáver ha aparecido en la
orilla del río. Al poco, se descubre uno nuevo de iguales características, lo
que indica la presencia de un asesino serial. Los resultados conducen la
pesquisa a Elizondo, un pueblo pequeño de donde es oriunda la protagonista. Junto a un puñado de familiares y de compañeros no siempre
colaboradores, Amaia no sólo deberá enfrentarse a la resolución de los casos sino también a sus propios fantasmas del pasado.
II.
En la novela se imbrican tres planos.
Primero, está la trama policial, donde aparecen pistas falsas, derivaciones
sospechosas y circunstancias no muy claras entre los hechos y sus personajes.
Luego se encuentra el plano personal de la protagonista, con su tenebrosa
historia a cuestas, compartida con sus dos hermanas y el espectro de una madre
que vuelve continuamente a hacerse presente. Finalmente, el mayor de los
aciertos ha sido incorporar a la historia parte de la rica mitología navarra,
con sus personajes nemorosos, su fauna pródiga y su riqueza culinaria.
III.
Como contracara, la novela adolece
de una notoria carencia de la tensión habitual en el género, que hace que la
narración se vuelva demasiado plana, sin matices, donde los diálogos por
momentos se transforman en sesudas explicaciones técnicas, sin relieves ni contrapuntos.
Además, abunda en clichés –v.g., la mujer promovida, ante los celos que eso
despierta en el staff masculino; la búsqueda (sin éxito) de la concepción,
etc.- y escenas algo trilladas, que conducen al lector hacia el previsible –y brusco-
desenlace, que sólo sorprende a la propia Amaia.
IV.
Por lo demás, fluida y amena, de
estilo directo y coloquial, sin florituras ni mayores aspiraciones, la novela
se disfruta como un pasatiempo: se lee ágilmente mientras se desarrolla y cae
en el olvido una vez concluida. Existe película de 2017 basada en ésta que parece
no haber alcanzado demasiada repercusión.
¡Hola Marcelo! Veo que no te ha emocionado demasiado esta primera novela de la saga de Dolores Redondo. Creo que yo la disfruté más que tú, en general la trilogía me gustó bastante y las pelis también, no están mal..
ResponderEliminarImagino que se te han quitado las ganas de seguir con los otros dos que quedan ¿no?. En fin..., para gustos ya se sabe, no podemos coincidir siempre
Besos
Hola, Marian!
EliminarEsperaba algo más contundente; temo que el negocio editorial ha hecho su parte y la cinematografía, otro tanto. No obstante, seguiré, como he anunciado, con el resto del material.
Entre nos, me ha gustado más Sciascia dentro del género. Al Montalbano de Camilleri aún no lo he visitado. Mi fugaz paso por Mankell tampoco me ha aportado mucho. De las pelis, no he visto ninguna.
Como digo, cuestión de hacer experiencia.
Un gran abrazo para ti.
Hola Marcelo
ResponderEliminarTe veo muy negro, jaja es broma, en tus lecturas. Ya sabes, creo que te lo he dicho alguna vez, que no me gusta la novela policial o negra o thriller o lo que quiera llamarase; no paso, y me quedo, en Chandler , Hammett y Macdonald, ( con un apunte y parada en "el último buen beso" de James Crumley, último buen consejo de mi gran amigo patagónico). DE esta novela te diré que aquí se leyó mucho y se vio la película con avidez, yo no he hecho nada de ambas cosas, pero sí te diré que ELizondo es un pueblo precioso, él y su zona son una de las zonas más bonitas que conozco.
cuídate
gracias
Hola, Maestro
EliminarEntonces, deberé creer que me has de ver como mujer, puesto que 'La mujer es lo más negro del mundo', según palabras de otro maestro, John W. Lennon.
Tampoco me llama a mi, Wine, el género policial. Deberé hacer acopio de esos señores que citas -de los que nada se aún-.
Me alegro que ese pueblo que cita la autora sea realmente precioso; la imagen de su descripción así lo amerita.
Gracias por darte una vuelta. Tomaré en cuenta el libro de Crumley.
Un fuerte abrazo.
Querido Marcelo. Pues esto es lo mejor de la autora así que le recomiendo no perder su apreciado tiempo en las siguientes entregas. Fíjese, que en el anterior encierro vi las películas y ni tan mal. Pero con el segundo libro esos defectillos que aquí se equilibran un poco con la novedad, la mitología y la ambientación, en el segundo libro brillan como joyas falsas y acaba uno hasta cabreándose. Del tercero no sería justo hablar porque solo leí el final por pura curiosidad y alguna página intermedia. La echó a perder.
ResponderEliminarBesitos advertidos
Agradezco tu consejo, Guapa, pero, como cantaba Celine Dion en 'Titanic' (nada más apropiado), 'mi corazón seguirá adelante'.
EliminarTomo en cuenta tus apreciaciones y recelos. No he visto las pelis, pero no parecen ser memorables.
Besitos agradecidos.
Leí la trilogía hace años y la verdad es que me gustó. Es cierto que cada libro me iba gustando menos y el balance final no es muy positivo. Creo que es de esas lecturas que pierden en el recuerdo. Las películas me gustaron más (tampoco son una maravilla), pero es que en cine, y más visto en casa como mero entretenimiento, soy más tolerante y bajo mucho el listón.
ResponderEliminarEn España todos los libros de la autora (yo no he vuelto a leer más) se convierten en fenómenos de ventas, pero te puedo asegurar que tenemos autores infinitamente mejores en ese género que son muy poco conocidos.
Un beso.
Me alegra tener una opinión completa, Rosa, cosa que te agradezco. Creo que no se me ocurriría ver las pelis -porque no me identifico con el género-, por más buenas que estén.
EliminarUn súperventas me aporta más reticencia que ganas de encararlo. Estoy convencido que debe haber otros autores que no gozan de gran prensa, pero que deben ser buenos. Aporta alguno, si puedes.
Un beso grande para ti.
Me permito recomendar a Alexis Ravelo que tiene novelas policíacas y otras que no lo son y es un gran autor. También Toni Hill, Carlos Bassas del Rey, Paco Gómez Escribano. Seguro que me dejo muchos que no se me ocurren ahora, pero estos son muy buenos y no demasiado conocidos. Cultivan el negro y el policíaco, pero con mucha carga crítica y una visión muy realista de la sociedad (sin hacer panfleto que es algo que no me gusta).
EliminarSi se me ocurre alguno más, lo pondré por aquí.
Un beso.
Tomo en cuenta tus sugerencias, Rosa. Salvo Toni Hill, el resto me resulta ignoto.
EliminarNo soy del palo, pero nunca se cuándo se ha de disparar en mi el negro o el policial.
Gracias por tu aporte.
Un beso para ti.
Hola Marcelo, habías anunciado que enfocarías tus lecturas a plumas femeninas. Recomiendo La ciudad de las damas, Crhistine de Pisan, una veneciana en la corte de Carlos V de Valois. Este le escribió en 1405. Fue contemporánea de Juana de Arco, incluso escribió sobre ella y todo eso antes del invento de la imprenta.
ResponderEliminarAllá por 1400, Cristina encerrada en su estudio (luego V. Wolf le tomaría para Una habitación propia), atribulada, se preguntaba cómo es que Dios, fuente de toda sabiduría y perfección, creó a la mujer, ser de escasa o nula virtud, carente de inteligencia, débil, etc., etc. En esos pensamientos estaba, desolé, cuando sin explicación alguna, es sorprendida por la presencia de tres mujeres, la Razón, la Rectitud y la Justicia. Cada una da lugar a un "libro" (capítulo), animándole a construir (escribir) la ciudad que da título al libro.
Vale la pena. Está en Siruela y también de libre disposición en internet. No cabe duda que la opcion debe ser mejor que esa señora de la trilogía.
Si de serie negra trata reitero la invitación a Acerca de Roderer.
También a El hombre que fue jueves, Chesterton.
Saludos lluviosos del otro lado del Plata.
Hola, Selva
EliminarMe permito recordarte que, según una máxima del siglo XI, la ansiedad conduce a embarazo en una mujer y a un notorio desembolso de dinero en un hombre.
En otro orden, el personaje de esta trilogía sólo existe para lo que le propuso su escritora. No sobrevive más de allí.
Ya tengo el libro de Guillermo. Habrá de esperar, como todos. También el de Chesterton -probablemente, un poco más-.
La lluvia -como tantas otras cosas- nos hermana, amiga charrúa.
Un fuerte abrazo.
No me llama mucho la trilogía que se inicia con esta novela. Debo de ser de los pocos que se ha mantenido al margen del boom. Sí me animé a ver las adaptaciones cinematográficas que se hicieron de las novelas. No sé por qué, ese tipo de historias suelen atraerme más en películas que en novelas. Tengo la última sin ver. Las dos primeras, sin aportar nada nuevo al género, me resultaron entretenidas. Como no tenía más expectativas, cumplieron bien su función en ese momento.
ResponderEliminarUn abrazo
Aparecía como algo interesante el intercalar parte de la mitología navarra en la historia, razón por lo que lo apunté.
EliminarNo he visto ninguna de las pelis. No deja de ser entretenido, pero sin aspiraciones.
Un abrazo para ti, Lorena.
Estimado Marcelo, te pido disculpas por mi insistencia. Sucede que los "grandes" (60+) sentimos que no tenemos tiempo que perder, esperar no es una opción, sería algo así como un despilfarro.
ResponderEliminarSigue lloviendo, sdos.
Querida Selva, soy de los que cree que nadie muere en la víspera. Si debe ser leído, lo será. Miles de libros -que ya están aquí- quedarán sin leer, me temo.
EliminarIgual, gracias por la sugerencia. La tendré presente.
Un abrazo.
Me ha llamado la atención ver esta entrada en tu blog y la lectura de la reseña me ha confirmado que la sorpresa ha sido genuina. Me gusta leer novela negra de vez en cuando, precisamente ahora estoy con Camilleri y su Montalbano, bueno, novela negra o novela policiaca o a mi querida Agatha. Cada vez huyo más de los éxitos de ventas del momento (aunque no siempre lo consigo) y con Dolores Redondo ni llegué a empezar, tu reseña me confirma que hice bien, me siento un poco bicho raro con este tema y ayuda moralmente un poco de apoyo. Un abrazo Marcelo.
ResponderEliminarLos había apuntado en su momento y los dejé correr hasta que se acallaran los rumores. La trilogía me pareció oportuna para un período de descanso; por eso les di lugar.
EliminarYo tampoco soy de leer policiales ni novedades; sobre todo las que vienen precedidas de aplausos.
Afortunadamente, Ana, no somos bichos raros. Pecamos de exceso de prudencia.
Un abrazo para ti.