jueves, 2 de noviembre de 2023

e-book 140. Esa dolorosa ausencia. Señora de rojo sobre fondo gris, Miguel Delibes

 

Booket, 2009

I.

               Fue la gentil invitación cursada por una amiga lectora quien me notificó que una puesta teatral basada en esta obra se hallaba en cartelera local, a cargo nada menos que del talentoso José ‘Pepe’ Sacristán. Actividades planeadas con antelación me privaron en esa fecha de ser parte de la compañía, pero me propuse asistir antes de la despedida; eso sí, habiendo leído el libro.

II.

                Nicolás, un pintor de prestigio que atraviesa una crisis creativa, le narra a Ana, su hija mayor, los últimos meses de vida de su madre, fallecida poco antes, mientras ella y su esposo permanecían en prisión debido a sus actividades políticas en contra del régimen de Francisco Franco. Allí aquél, mientras bebe y va relatando los últimos tiempos de su mujer, repasa los momentos más memorables de su vida junto a ella, exhibiendo con toda crudeza el vacío que le propina esa dolorosa ausencia.

III.

               Ambientada hacia fines de 1975, este viudo desolado congrega en un monólogo imperdible los detalles más significativos de la personalidad de su esposa: su inveterada inconstancia, su intuición supina, su don de gentes y ubicuidad, su carácter afable siempre dispuesto al auxilio y su denodado optimismo, matices contrapuestos a los del narrador, según él mismo reconoce. Mientras, va intercalando los primeros síntomas de su enfermedad, la asistencia al médico familiar y los diversos estudios que condujeron a un diagnóstico acertado y tras ello, a la cirugía y sus complicaciones que llevaron a un repentino e inesperado deceso.

La versión digital, gentileza de EpubLibre

IV.

                Es de destacar la fluidez narrativa del texto, que alterna comentarios graciosos con escenas conmovedoras. La decoración de la casa –suya y la de la hija casadera-; el buen trato hacia los amigos propios como a los colegas de su marido; su creatividad intempestiva en medio de reuniones sociales tediosas y su compromiso de vida, criando a la nieta mientras sus padres se hallaban detenidos, nada parece habérsele escapado a esta mujer proverbial, llena de ganas de vivir y razón no solo del éxito e inspiración de su marido sino también de su actual sinsentido.

V.

               De estilo directo, con elementos autobiográficos, el uso de una prosa poética y abundantes analepsis, Delibes rinde culto a su amor de toda la vida: el que sintió por su cónyuge Ángeles de Castro, fallecida en 1974. Al decir de su narrador –alter ego del autor-, su sola presencia aligeraba la pesadumbre de vivir. El título del libro está tomado del retrato que le hiciera Eduardo García Benito. El guion adaptado –que se apega muy bien al original- permite el lucimiento personal de Sacristán sobre tablas. Un sentido homenaje ambos, libro y obra de teatro. Para no dejar pasar.

4 comentarios:

  1. Leí la novela hace muchos años. La obra no la he visto, pero a José Sacristán le vi en otra obra basada en Las guerras de nuestros antepasados, también de Miguel Delibes. Ambos, escritor y actor, me han gustado siempre mucho.
    Un beso.

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    1. Menudo texto! Imagino que todo ser humano que es descripto como lo hizo Delibes, debiera sentirse halagado.
      El trabajo del Pepe sobre escena ha sido brillante. Si era su manera de despedirse de las tablas, ha escogido LA obra para lucirse.
      Un beso para ti, Rosa.

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  2. Ay, es que no quiero más drama...con lo fea que pinta la realidad no quiero leer más de épocas que pintaron igual de mal. Pero también es cierto que el libro con el que me hice lectora apasionada fue uno de este autor, El camino. Mi historia favorita, me enamoré de Daniel y quería ser amiga de la niña de las coletas. Sin embargo, esto ha pesado mucho y ha hecho que no me haya atrevido con otro libro del autor. Mal por mi parte. Me espero a otra historia.
    Besitos sin sentido

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    1. Fui impulsado a incluir el título entre mis lecturas por la puesta en escena del Pepe Sacristán. La obra literaria ya de por sí es conmovedora; el actor sobre tablas, la ha llevado mucho más a la emoción.
      Hay muchas obras de origen español que conmueven; en eso Norah, te tengo una sana envidia.
      Besitos dulzones.

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